Hace unos años planeé un viaje hasta aquí llevada por la curiosidad. Fué en ese tiempo que descubrí también el yoga, y empecé mi primer curso de profesorado, no para impartir clases.. sino por curiosidad también ( si, creo que básicamente eso mezclado con algún que otro ingrediente más, es lo que me mueve..).
Así que diseñé un viaje con mucho tiempo y mimo, absolutamente a la medida de mis necesidades. Tenía que haber yoga, senderismo, cultura, gastronomía, diversión, aventura, artesanía… y una larga lista de cosas que poco a poco tomaron forma, gracias a un querido amigo mío , una de esas personas que te encuentras por el camino y que se quedan para siempre.
Me acompañaron dos amigas , y tengo que decir que creo que ni ellas ni yo, nos hemos reído más en toda nuestra vida… madre mía!
Cachemira es un sitio absolutamente diferente de lo que había conocido de la India hasta ese momento. De hecho, es parte de la India ahora, pero desde hace relativamente poco tiempo (1947), y está dividido en 3 regiones cada una dominada por un país diferente, Pakistán, India y China, lo que la hace una de las regiones mas conflictivas política y militarmente del mundo. Esto suena fatal, ya lo sé… ¿cómo se va a llamar El Paraíso en la Tierra a una zona con éstas características? Pues yo os lo voy a explicar…
Como ya he comentado antes, no es como la India (salvo en el caos típico de las calles donde todo se mezcla.. vacas, personas, motos, perros, bicicletas, carros llenos de cualquier producto.. de eso no se libra). No comparten cultura, sus raíces son otras, la comida es diferente, aquí no hay vegetarianos… les encanta la carne, y tienen una gastronomía deliciosa, no sabría decir cuál es mi plato favorito…ahora sólo pensando, se me hace la boca agua...
La música y el folklore también son diferentes, bueno… y el idioma, ya que tienen el suyo propio. Incluso son diferentes físicamente.
El arte y la arquitectura son una maravilla, su ascendencia es persa.. así que tanto las mezquitas, como los palacios, como sus parques.. son auténticas maravillas.
Pero sin duda alguna… con lo que me quedo es con los paisajes y con la gente. Me imagino que gente hospitalaria la hay en muchos sitios.. pero más que aquí? imposible! llevan absolutamente en su sangre, que tienen que hacerte sentir no como en tu casa… sino mucho mejor!! Es algo espectacular… que yo no he visto en ningún otro lugar del mundo, en nuestro caso, como somos mujeres… nos sentimos como si fuéramos auténticas princesas.
Tiene infinidad de sitios bonitos que visitar…la gente es muy buena (y tan simpática pese a la vida tan dura y tan difícil que llevan!), es una cultura tan interesante y tan pura, que creo que merece la pena fijar un poco la vista aquí.
Llevan 3 años desesperados, pasándolo muy mal, viendo cómo su cultura, su economía, sus costumbres y sus raíces, son vapuleadas y manipuladas por personas sin escrúpulos (todos sabemos que no es el primer mundo precisamente), a las que no les importa para nada las carencias y las situaciones horribles que ha generado esta gestión. Pobreza, hambre, aislamiento, atraso, subdesarrollo en todos los aspectos… y mucha tristeza al fin.
Como en éste tema no se puede hacer nada.. pensé que activando un poco la economía de pequeños talleres,(no de grandes compañías que monopolizan algunos mercados y generan mucho trabajo, pero poco beneficio al artesano), de los que comen muchas familias, podía aportar mi granito de arena… diminuto por ahora, pero que me gustaría que creciera con el tiempo y fuese una fuente de felicidad y relax para los niños a los que alcance. Creo que les falta una infancia más alegre, más despreocupada, con más deporte, más juegos y sin miedos. Por eso, los beneficios generados por la venta de los bordados (zafus, bolsters, bolsitas para los ojos…) van absolutamente íntegros para éste propósito.
Así ha nacido Sunkiss, de una mezcla entre mi amor al yoga, mi tendencia al diseño y a crear cosas bonitas (al menos para mi...)y diferentes, y mi necesidad de ponerme al servicio de los demás en lo que pueda. En éste caso, crear productos relacionados con la práctica de yoga, que sean de la mejor calidad, ecológicos, artesanos, de comercio justo, bonitos, diferentes y que hagan felices a quienes los usan y a quienes los hacen con sus manos. Sólo espero que os trasmitan la misma energía positiva con la que fueron creados.